Wednesday, June 20, 2007

Palabrería del Arrepentimiento



No seré yo realmente el que comience la palabrería del arrepentimiento, no. Pero el vacío terminal. Cómo aguantarlo. Estoy aquí sentado, en mi puesto de batalla, en un puesto peleando una guerra que no me interesa. Hablar de más, escribir de más, deprimido hasta el tuétano, triste. Triste, sí, triste. Con ganas de pararme y mandar todo a la misma mierda. Lo juro. Todo me parece cínico. Pero peor que nada, el monstruo de 7 cabezas, el cínico, el cerdo numinoso, asquerosillo. Yo. Es increíble como dos putas letras, un monosílabo tan diabólico como ése logre despertar las más contradictorias de las sensaciones. Yo parado, yo sentado, anulado, falsamente interesado en cosas interesantes, se me vienen las responsabilidades, ¡me meto en cada estupidez sin pensar! A veces pienso que no pienso, o a veces pienso en la estúpida idea que todo esto me deviene de pensar que pienso que pienso demasiado... estúpido no? Lo más falso, esta última idea me viene de lo mismo, me altera, me quiero ir, no puedo seguir presenciando como seguimos haciendo literatura con los muertos, con nosotros los muertos, de muerte perniciosa, de tedio, en vida.

“Dinos como Sobrevivir a esta Locura” (Recuerdos de Vacaciones)


Periodo estival, periodo de pausa, de respiro, pero “dinos como sobrevivir a esta locura”, algo de eso importa? se puede descansar secretamente adormilado por el Vallium de los 15 días hábiles? pero “dinos como sobrevivir a esta locura”. Carpas, viajes, ajustes de motores, no olvides el saco, los huevos y ese librito por si acaso nos dan ganas de leer, lo mas probable es que durmamos más de la cuenta nos ganemos una insolación de putamadre y se nos hinche el juanete buscando un lugar piola donde echarnos un polvito al aire libre o lisa y llanamente nos descueremos por ese bronceado flaite por que el bendito bloqueador se nos quedó en el botiquín de la casa y aquí puta que son caros.
Llevemos a mi madre, y a la tuya, a quién dejar la llave de la casa para que alimente al Nerón, no cacho mucho al vecino, tiene cara de pocos amigos, y la otra vecina fue la que nos echó los pacos el día del asado y la bailanta, pero “dinos como sobrevivir a esta locura”.
Según la Real Academia de la lengua, Vacaciones: “Suspensión parcial de los negocios y los estudios, asueto”. Otra acepción puede ser cambio de rutina, dejar el stress de las obligaciones cotidianas, de la administración de la buena vida, colegios, pagos de cuentas, levantadas a las siete, la teleserie, las noticias, el copete en fin. Difícil romper inercias en la era de las inercias. El tema siempre es hacer lo que otros hacen; si todos trabajan como chinos, yo también trabajo como chino; todos autito, yo también autito; todos hablan como el personajillo de moda, yo también hablo como el personajillo de moda; todos vacaciones, yo también vacaciones. Otra maña, queremos hacer en 15 días todo lo que no hicimos en los 350 restantes y esto multiplicado por la vida, queremos viajar, arreglar la gotera del techo que nos cagó el modular nuevo, dormir a pata suelta, arreglar el jardín, pescar, visitar al tata en el hospicio, bañarnos en paradisíacas playas, echar un polvito con un amor de verano, o con la señora aunque sea en una cama playera llena de pulgas. Están también quienes les baja la intelectualidad veraniega y meten a presión en el huequito del bolso entre el shampoo y la toalla el librito que no han podido terminar en todo el año, de’sos que “te hacen parecer + inteligente”, que claro está, volverá con el marcador de hojas en la misma página en que ha estado desde el invierno.
La carretera, en auto, micro o bus pirata, el mismo infierno estival de descansadores que no descansarán hasta llegar a un buen lugar de descanso, llámese playa, río, laguna, lo más lejos posible -pa’que cachen el nivel de descanso que uno se pega- No eche sobre peso, agüita pa’l viaje, cuidado que se sobrecaliente el auto, no abrir de un viaje tapa del radiador (posible quemadura de 2° grado en manos y cara) y por favor “dinos como sobrevivir a esta locura”.
La verdad no tengo auto, señora, ni pega estable, por ende menos vacaciones oficiales, pero “dinos como sobrevivir a esta locura”, y confieso que el cansancio de la ru(t)ina también llega por estos lares, así como así, como lo leen, lo escuchan o lo ven, solo quería escribir algo que me diera la excusa de contarles que a pesar de’ste calor de fritanga aconcagüina salvé el verano gracias a un librito “Dinos Como Sobrevivir a Esta Locura” de Kenzaburo Oé, autor que de Japón es, o sea nipón del país del sol naciente, moderno, post Hiroshima, burlón con sus héroes imperiales, descarnado y a veces cruel. Recomendable su lectura (ojo, premio Nobel y todo). Aunque sea como dice Hess “solo para locos” en ningún lado aparece la receta para sobrevivir a este embeleso, aunque pienso que sólo leyendo se logre rasguñar un poco ese telón monomaniático del éxito, para así se filtre un poco de sensatez… o viceversa…no sé, locura al fin.

Tuesday, June 19, 2007

Pajarón, el que no lee


Primero: el 23 de abril se celebró el “Día internacional del libro y del derecho de autor”, seguramente lo leyó en el diario, lo vio en la tele o se lo contó un amigo. Segundo: seguramente ya se sabe de memoria porqué en esta fecha precisamente se celebra tan mentado día (23 de abril de 1564 nace William Shakespeare, que además en esta misma fecha pero de 1616 muere. En la misma fecha y exactamente el mismo año (1616) murieron también el español Miguel de Cervantes y Saavedra y el cronista Garcilaso de la Vega) La madre de las coincidencias ¿no? Sin contar otra tropa de célebres escritores menos conocidos que nacieron o murieron un 23 de abril hasta la fecha, entre ellos el más conocido Vladimir Nabokov (ruso) autor de la célebre “Lolita” conocida por sus versiones cinematográficas. Tercero: La idea de celebrar en el mundo el "Día internacional del libro", fue una propuesta de la Unión Internacional de Editores (UTE), y presentada por el gobierno español a la Unesco quien aprobó en forma unánime la propuesta. Cuarto: En Chile durante los gobiernos de la concertación y con la creación de la Biblioredes y el Fondo del libro y la lectura, este día se ha transformado en una efeméride más que se debe “obligatoriamente celebrar” en las escuelas y bibliotecas. Quinto: todo lo anterior quizá lo describo gracias a los datos que pululan por la red, diarios y la televisión etc. no por lo “letrado” ni eximio lector. Y aquí viene el problema, con tanta faramalla libresca nos deberíamos preguntar si en chile ¿hemos logrado crear una cultura lectora de veras? Creo que aun falta esa parte que no se aprende con el manejo de los datos duros que estas políticas de buenas intenciones ha creado durante estos años, lectores de solapas y contratapas y a lo más de resúmenes bajados de internet, profesores mediante. Sexto: la pasión por leer puede nacer en cualquier momento, lo único que hace falta es estar dispuesto, y creer en el “misterio” que conlleva esta costumbre. Empezar por acumular libros como locos ayuda, precios y lugares sobran, hacer de estos un fetiche, un “misterio gozoso”. De ahí, de tanto acumular nacerá el bichito, la curiosidad. Séptimo: hojee, lea, relea, busque citas, aprenda algunas de memoria, piérdale el respeto al artefacto libro y a los escritores, no están ni en el Olimpo ni en el Parnaso, defecan igual que todos por lo tanto son asequibles. Octavo: haga el ejercicio hasta que encuentre el libro aquel, el que cada uno tiene predestinado, el que le abrirá la brecha hacia lo común desconocido, el tema es infinito, de ahí de seguro cuando encuentre el verso, la frase despabiladora de seguro no pararán. Último: en definitiva, la cosa es simple, pajarón el que no lee, aunque no más pillo el que lo hace.